ACEPTO ESTE DESTINO
Estoy aprendiendo
a
habitar estos días previsibles
en los
que siempre me levanto a las 7:30
y
desayuno siempre un tazón de leche
con
galletas. Estos días ni tristes
ni
alegres
de los
que uno no espera gran cosa.
Ya es
bastante
si el
día amanece soleado,
y sigo
respirando otras veinticuatro horas,
y no
sufro ni provoco sufrimiento a otros,
y
tengo una compañera
a
quien agarrar de la mano,
y
algunos poemas que llevarme al alma
antes
de preparar el despertador
para
que suene a las 7:30
y
apagar la luz.
Estou a aprender
a habitar estes dias previsíveis
em que me levanto sempre às 7.30
e tomo um copázio de leite
com bolachas. Estes dias
nem tristes nem alegres
dos quais não se espera grande coisa.
Já é bastante
se o dia amanhece com sol,
e respiro ainda mais vinte e quatro horas,
e não sofro nem faço sofrer os outros,
e tenho companheira
a quem dar a mão,
e alguns poemas para fazer bem à alma
antes de acertar o despertador
para tocar às 7.30
e depois apagar a luz.
(Trad. A.M.)
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