CALIGRAFÍA
Ha apoyado la frente en el cristal
frío, empañado, con trasluz de invierno.
Escribe el nombre de ella y, a través
de las líneas que traza con el dedo,
la ha visto en un paraje solitario
con el mar y las rocas en la noche.
Al fondo, las estrellas: de pronto, las gaviotas
alzan el vuelo como un resplandor
al paso de un falucho. Se ha engañado:
detrás de la ventana hay una calle
que el alba hace más triste, sin un alma,
con coches aparcados.
Tras las líneas comienza a amanecer:
el sol naciente borrará ese nombre
en la escarcha rosada del cristal.
Joan Margarit
Encostou a fronte ao vidro
frio, embaciado, em contraluz de Inverno.
Escreve o nome dela e, através
das linhas traçadas com o dedo,
contempla-a num lugar solitário
com o mar e as rochas pela noite.
Ao fundo, as estrelas; súbito, as gaivotas
levantam voo como um resplendor
à passagem duma falua. Enganou-se:
para lá da janela há uma rua
que a aurora faz mais triste, sem ninguém,
com carros estacionados.
Por trás das linhas começa a amanhecer:
o sol nascente apagará esse nome
na face gelada do vidro.
(Trad. A.M.)
.