Tal vez a nuestra muerte el alma
emigre:
a una hormiga,
a un árbol,
a un tigre de bengala;
mientras nuestro cuerpo se disgrega
entre gusanos
y se filtra en la tierra sin memoria,
para ascender luego por los tallos y las hojas,
y convertirse en heliotropo o yuyo,
y después en alimento del ganado,
y así en sangre anónima y zoológica,
en esqueleto,
en excremento.
a un árbol,
a un tigre de bengala;
mientras nuestro cuerpo se disgrega
entre gusanos
y se filtra en la tierra sin memoria,
para ascender luego por los tallos y las hojas,
y convertirse en heliotropo o yuyo,
y después en alimento del ganado,
y así en sangre anónima y zoológica,
en esqueleto,
en excremento.
Tal vez le toque un destino más
horrendo
en el cuerpo de un niño
que un día hará poemas o novelas,
y que en sus oscuras angustias
(sin saberlo)
purgara sus antiguos pecados de guerrero o criminal,
o revivirá pavores,
el temor de una gacela,
la asquerosa fealdad de comadreja,
su turbia condición de feto, cíclope o lagarto,
su fama de prostituta o pitonisa,
sus remotas soledades,
que un día hará poemas o novelas,
y que en sus oscuras angustias
(sin saberlo)
purgara sus antiguos pecados de guerrero o criminal,
o revivirá pavores,
el temor de una gacela,
la asquerosa fealdad de comadreja,
su turbia condición de feto, cíclope o lagarto,
su fama de prostituta o pitonisa,
sus remotas soledades,
sus olvidadas cobardías y
traiciones.
ERNESTO SÁBATO
Sobre héroes y tumbas
(1961)
(1961)
Talvez à
morte a nossa alma emigre,
e se faça
uma formiga,
uma árvore,
ou um tigre
de Bengala;
enquanto o
corpo se desfaz
entre os
bichos
e se filtra
na terra sem memória,
para se
elevar depois pelos talos e folhas
e converter-se
em girassol ou erva daninha,
fazendo-se
então alimento para o gado,
e daí sangue
anónimo e zoológico,
já
esqueleto,
já
excremento.
Ou talvez
lhe calhe um destino mais horrendo
no corpo de
uma criança
que um dia
fará poemas ou romances
e que em suas
escuras angústias
(sem saber)
purgará seus
pecados de criminoso ou guerreiro,
ou reviverá
pavores,
o temor de
uma gazela,
o asco
horrível da doninha,
sua turva
condição de feto, ciclope ou lagarto,
sua fama de
puta ou pitonisa,
suas remotas
solidões,
suas mil
cobardias e traições.
(Trad. A.M.)
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