23.8.16

Eduardo Chirinos (Fragmentos)





FRAGMENTOS DE UNA ALABANZA INCONCLUSA




Debe haber un poema que hable de ti,
un poema que habite algún espacio
donde pueda hablarte sin cerrar los ojos,
sin llegar necesariamente a la tristeza.
Debe haber un poema que hable de ti y de mí.
Un poema intenso como el mar,
azul y reposado en las mañanas,
oscuro y erizado por las noches
irrespetuoso en el orden de las cosas, como el mar
que cobija a los peces y cobija también a las estrellas.
Deseo para ti el sencillo equilibrio del mar, su profundidad
y su silencio, su inmensidad y su belleza.
Para ti un poema transparente,
sin palabras difíciles que no puedas entender,
un poema silencioso que recuerdes sin esfuerzo
y sea tierno y frágil como la flor que no me atreví a enredar
alguna vez en tu cabello.
Pero qué difícil es la flor si apenas la separamos del tallo
dura apenas unas horas,
qué difícil es el mar si apenas le tocamos se marcha lentamente
y vuelve al rato con inesperada furia.
No, no quiero eso para ti.
Quiero un poema que golpee tu almohada en horas de la noche,
un poema donde pueda hallarte dormida, sin memoria,
sin pasado posible que te altere.
Desde que te conozco voy en busca de ese poema,
ya es de noche. Los relojes se detienen cansados en su marcha,
la música se suspende en un hilo
donde cuelga tristemente tu recuerdo.
Ahora pienso en ti y pienso
que después de todo conocerte no ha sido tan difícil
como escribir este poema.


Eduardo Chirinos

[Vallejo and company]




Deve haver um poema que fale de ti,
um poema que more em algum lugar
onde te fale sem fechar os olhos,
sem tombar por força na tristeza.
Deve haver um poema que fale de ti e de mim.
Um poema intenso como o mar,
azul e repousado de manhã,
negro e eriçado pela noite,
rebelde na ordem das coisas,
como o mar
que cobiça tanto os peixes como as estrelas.
O singelo equilíbrio do mar te desejo,
seu silêncio e profundidade,
sua imensidade e beleza.
Para ti o poema transparente,
sem palavras difíceis que não entendas,
um poema silencioso que recordes sem esforço
e seja terno e frágil como a flor
que eu não me atrevi a prender-te no cabelo.
Mas que difícil é a flor se mal a cortamos
dura apenas umas horas,
que difícil o mar se mal lhe tocamos
vai-se embora,
para voltar depois com grande fúria.
Não, não quero tal para ti,
quero um poema que te bata de noite na travesseira,
um poema onde te ache dormida,
sem memória,
sem passado possível que te altere.
Desde que te conheço que busco tal poema,
e é já de noite. Os relógios detêm-se cansados em sua marcha,
a música suspende-se num fio
onde pende triste a tua lembrança.
Agora penso em ti e penso
vendo bem que conhecer-te não foi tão difícil
como escrever este poema.


(Trad. A.M.)



>>  Otro paramo (10p) / Vallejo and company (7p) / Cervantes (sinopse/linques) / Wikipedia

.