BUENOS DÍAS, MUNDO
Buenos días, mundo.
Me alegra verte afuera al despertar.
Celebro que no hayas
-la ocasión la pintan calva-
aprovechado el manto de la noche maldita
para irte por siempre al inframundo.
También me reconforta
que aún te habiten pájaros cantores,
‘meistersinger’ del bosque en el jardín;
que el sol severo nos escalde aún
y nos torture el rudo ozono
- como todos los días.
Soñé que te habías ido,
conmigo, hacia el infierno
y que se habían quedado aquí
sin mundo todas las demás criaturas:
piedras, grajos, insectos o personas.
Te veo tan grande y bello,
que me río de los siniestros solipsistas
de antaño.
No has de esfumarte cuando yo me extinga.
Canto tu salud de hierro,
tu verde corazón y tu estructura
de granito.
Buenos días, querido, hermoso mundo.
Eduardo Lizalde
Bom dia, mundo.
Alegra-me ver-te cá fora, ao despertar.
Ainda bem que não aproveitaste
- a ocasião pintam-na calva –
o manto da noite maldita
para te ires para sempre até ao submundo.
Reconforta-me também
que te habitem ainda pássaros cantores
‘meistersinger’ do bosque no jardim;
que o sol severo nos escalde ainda
e nos torture o rude ozono
- como todos os dias.
Sonhei que tinhas partido,
comigo, para o inferno
e que tinham ficado aqui
sem mundo as demais criaturas:
pedras, gralhas, insectos ou pessoas.
Vejo-te tão grande e tão belo,
que me rio dos sinistros solipsistas
de antanho.
Não hás-de esfumar-te quando eu me extinguir.
Canto a tua saúde de ferro,
teu verde coração e tua estrutura
de granito.
Bom dia, meu querido, mundo lindo.
(Trad. A.M.)