Es tarde ya en la
noche
y la playa está desierta.
Rompe el mar
sobre las rocas.
Un aire cálido,
espeso de salitre
y de recuerdos,
me baña la cabeza.
Cierro los ojos.
Inhalo.
Me dejo llevar.
Y luego pienso,
como casi siempre
que me pasan estas cosas,
en Proust.
Pero no he leído
a Proust.
Qué importa.
La vida es bella.
Quién necesita
a Proust.
Roger Wolfe
Noite alta
e a praia deserta.
O mar quebra
nas rochas.
Um ar quente,
espesso de salitre
e recordações,
molha-me a cabeça.
Fecho os olhos,
inspiro,
deixo-me levar.
E depois penso,
como sempre que isto
me acontece,
em Proust.
Mas eu nunca li
Proust.
Que importa,
a vida é bela,
quem é que precisa
de Proust?
(Trad. A.M.)