16.7.14

Miriam Reyes (Meu pai doente de sonhos)





Mi padre enfermo de sueños
en el asfalto incandescente
de cien mil mediodías caminados
bajo el sol en vertical
perdió sus pies
y apoyado en sus rodillas sigue buscando
el camino de vuelta a casa.

Mi padre sueña,
rendido por el cansancio,
que vuelve a su tierra y planta sus piernas
y le crecen pies jóvenes
y la savia de su tierra negra
le alivia el dolor de las arrugas
y resucita sus cabellos muertos.

Luego despierta en un piso alquilado
a la ciudad de los huracanes de la miseria
y blasfema y maldice y no tiene amigos.
Escondido en la noche
papá llora por las certezas que lo defraudaron.

Del otro lado de su piel
mamá llora por mamá
mamá llora por su casa que ya no habita
y por paz y reposo y risa.

Papá y mamá lloran
cada uno a espaldas del otro en la cama
en el más crudo estruendoso hermoso silencio
que modula en frecuencias infrahumanas
sonidos que se articulan como palabras:
«si aquí no están mis sueños
cómo puedo dormir aquí».
Y que sólo yo escucho
con la cabeza enterrada en la almohada.

Concebida de la nostalgia
nací con lágrimas en el sexo
con tierra en los ojos
con sangre en la cabeza.
No soy lo que soñaron
como tampoco lo son sus vidas.

Miriam Reyes



Meu pai doente de sonhos
no asfalto incandescente
de cem mil meios-dias andados
debaixo do sol a pique
perdeu os pés e de joelhos
continua em busca do caminho para casa.

Meu pai sonha,
vencido pelo cansaço,
que volta à terra e planta as pernas
e nascem-lhe pés novos
e a seiva da terra negra
alivia-lhe a dor das rugas
e ressuscita-lhe os mortos cabelos.

Depois acorda num andar arrendado
à cidade dos furacões da miséria
e blasfema e pragueja e amigos não tem.
Escondido na noite, chora
papá as certezas que o defraudaram.

Do outro lado da pele
mamã chora por mamã
pela casa que já não habita
e por paz e repouso e alegria.

Choram papá e mamã na cama
cada um nas costas do outro
no mais belo cru estrondoso silêncio
que modula em frequências infra-humanas
sons que se articulam como palavras:
“Não estando aqui meus sonhos,
como posso eu dormir aqui?”.
E que só eu escuto,
com a cabeça enterrada na almofada.

Concebida pela saudade
nasci com lágrimas no sexo
com terra nos olhos
com sangue na cabeça.
Não sou aquilo que sonharam
como não o são tão pouco as suas vidas.


(Trad. A.M.)

.